jueves, octubre 27, 2011


Imágenes motivacionales...
Efectos del pulque en el periodismo.

Advertimos a nuestros parroquianos y visitantes que la única intención de colocar esta fotografía de los años cuarenta del siglo pasado en el muro de La Virtud es la de recordarles que la ingesta de neutle en volúmenes inmoderados puede inducir al interfecto a la cometer tarugadas de azotea como la que se ilustra.
Dicen los que saben que el individuo que, en 1948 andaba haciendo pasitos de gato en el pretil de un rascacielos es -o se parece a- un tal Carlos Marín o Mariles quien aún vive; que es periodista a pesar de su provecta edad y que asea calzado y escribe gacetillas obscenas a modo de publicidad para un tugurio capitalino del rumbo de Tacubaya que le nombran Los Pinos o Los Vinos, o algo así, y que luego se las publica el diario Milenio.
El sujeto también trabaja en Televisa: actúa en un programa cómico patrocinado igualmente por el antro de marras, llamado "Tercer Grado" en donde los demás payasos ya no lo aguantan, a causa de los fétidos humores que despide.
Los eruditos de la farándula que que han pasado por acá a observar la imagen, aseguran que la dama no es Lolita de la Vega cuando se iniciaba en el oficio periodístico, sino Mirna Loy, una famosa actriz norteamericana de la época, en una escena del filme "The thin man".
Sea lo que sea, si por alguna razón (involuntaria, se entiende) usted llegase a consumir demasiado tlachicotón como el ruco Marín, no se le ocurra subirse a hacer piruetas en alguna azotea, puede ser fatal.
Mejor póngase a escribir obscenidades por encargo, quién quita y se las publica el periódico Milenio en su primera plana y luego hasta lo nombran director editorial o estrella del canal que le platiqué.

2 comentarios:

Xavier González Fisher dijo...

Ilustrísima: Ya sabe que no me gusta contradecirlo, pero si seguimos las "líneas de pensamiento" del ínclito Abel Quezada, resultaría que el "tal periodista" de "la gráfica" está demasiado bien comido y demasiado bien vestido... además, de como Vuecencia señala, bien bebido...

¿No será más bien un "suspirante" a político? O al menos de que el "escriba" ese, lo tengan bien "maiceado"...

Armando Moncada dijo...

Maese: dicen las malas lenguas que hoy día los periodistas de nivel nacional clamorosamente maiceados (por antonomasia) son dos; ambos, además, exégetas del cinismo y la venalidad: el tal Marín y su alter ego, también de Milenio, el Ciro Calcetín.
Lo del periodista con hambre es ya una leyenda urbana, cuyos últimos ejemplares se extinguieron precisamente en tiempos de Abel Quezada. No así la sub-especie de los "gacetilleros con sed": de esos hay más que antes. Estos ultimos, fortunadamente no caen por acá; aborrecen el neutle, solo chupan whisky (de gorra, of course).