Beber Mejor...
Nuevo parque y monumento a San Expedito.
De toda la exquisita clientela de esta capilla pulquera, es el Maistro Mecates el individuo más -digamos- cosmopolita: el viejo anarquista poblano viaja por todas partes del mundo; un día regresa de Curécuaro y al siguiente ya se le ve camino a San Petersburgo; y así todo el año, de allá para acá. Lo bueno es que siempre nos trae cosillas y souvenirs.
Hoy llegó de Guadalajara muy temprano; en su guayabera se podían apreciar indiscretos goterones de pozole rojo que no dejaban duda de que anoche había cenado como Dios manda en casa de La Chata, allá por la calle Vidrio.
El buen amigo se dejó venir con todo y maleta, directo desde el aeropuerto a La Virtud, únicamente para contarnos la noticia de que en la perla tapatía van a construír un lujoso parque recreativo que se llamará Parque San Expedito y contará con una estatua del milagroso mártir de cuarenta y cinco metros de alto.
Que, como ya es costumbre en aquel estado, las obras serán costeadas íntegramente con recursos federales, no importa que no haya con qué construír escuelas o carreteras; que primero son los asuntos de fé, según la directríz gubernamental que ha impuesto por sus fueros en la administación pública de por allá el señor cardenal Juan Sandoval Íñiguez, primerísima e ilustrísima autoridad del rumbo, a quien sus malquerientes (dos o tres nomás) apodan "El Jetas".
Nuestro viejo amigo nos mostró esta imágen de la ceremonia de presentación de la maqueta. En ella se pueden apreciar al presidente del empleo, quien estuvo presente para dar el visto bueno al proyecto, a la señora que dice ser tataranieta del santo, que atiende una verdulería en el mercado de Zapotlanejo y antes fué Secretaria de Energía, a un cura elusivo y escurridizo que según supo el Máistro, es el secretario oficioso de obras públicas, y al C. Gobernador de la católica entidad, cuyo nombre se nos escapa por el momento pero que segun sabemos le apodan "Etilio". Nos contó también que el calvo que está detrás es el cargador de botellas del mandatario jalisciense y que, pobrecillo, en este caso tuvo que trabajar doble ya que en el grupo había dos de la misma arma.
El Máistro, cuando terminó de referirnos los detalles del evento se quedó callado por un instante; extrajo un cigarrillo y lo encendió con paciente solemnidad y luego sus ojillos le brillaron cuando exclamó, alzando un poco la voz, solo para que oyeran bien unos parroquianos del Comité Local Electoral del blanquiazul que libaban sus pulques y cuchicheaban en la mesa del fondo:
--Hay que comprar estampas con la imágen de San Expedito y colocarlas en todas las oficinas gubernamentales, se va poner de moda.
--Así, en lugar de celebrar en el año de Hidalgo, mejor celebraremos el año de San Expedito...ah, y lo mejor es que alguien hará un gran negocio con la concesión federal exclusiva para la impresión de las imágenes del santo a nivel nacional; en Compranet ya andan buscando proveedores.
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Imágen: fotomontaje de el Mecates sobre una foto de SDP Noticias.
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