jueves, marzo 08, 2012

En Guanajuato...
Chupe callejero y visita Papal.

Informa la prensa de México que las autoridades del muy católico y pío Estado de Guanajuato han prohibido la venta de bebidas alcohólicas en las calles por donde pasará el convoy del Papa Benedicto XVI durante su  próxima visita a la entidad.
Ah...qué caray!...exclama en voz alta el siempre comedido y decente licenciado Memijes, personaje muy estimado por la grey que ahoga sus penas burbujeando en los elíxires de los toneles de La Virtud. 
  --Y si durante el trayecto se le antoja de pronto al Sumo Pontífice echarse un pulque (o una espumosa), qué harán los organizadores?
  --No, no se ofendan. Ha sucedido que, tal como lo solía haceren sus tiempos el presidente Ronald Reagan, el Papa Ratzinger suele detenerse inesperadamente en alguna taberna de Roma para degustar una bira freda o para entonarse el spíritu súo con un farolazo fuertesón. Hay fotografías de ello; como buen alemán le gusta beber, supongo -je-je- que moderadamente.
  --Qué harán los organizadores? repito: desviarán la ruta del Papa-Móvil unas cuadritas para buscar una piquera decente, de verse, donde pueda refrescar el gurguñate Don Benedicto tranquilamente, sin que los fieles le pidan indulgencias y estampitas o algún fanático se abrace a sus tobillos y le succione los dedos con fruición, como lo hizo el merolico Vicente Fox cuando vino el anterior pontífice?
Algo tendrán previsto las autoridades para evitar que ocurran estas feas situaciones.
  --Por otro lado, a los y las que deseen llevar su anforita o botellón para la enjugar dignamente las emociones del piadoso encuentro con el santo padre y para soportar mejor las inclemencias del sol durante la larga espera, la autoridad les va a permitir chupar en la vía pública como Dios manda?... o se los llevará la Julia al bote, como pollos?... y lo recaudado por multas será donado por el señor gobernador para la capa de Norberto?
Nos dice el Pelucas que acaba de enterarse de un sabroso chisme: que Víctor Machuca El Manubrio, otro parroquiano frecuente (consejero de la CANACO de Torreón) ya se encuentra instalado en León, Gto. y no precisamente para vitorear al ilustre visitante desde un buen lugar en la acera. No, señor, para  otra cosa más prosáica y farisea:
Resulta que él y otro joven empresario de la Comarca Lagunera fueron quienes concibieron y promovieron la genial idea de prohibir el chupe callejero ante el mencionado gobierno estatal. Según esto, el comerciante Manubrio, asociado con un júnior del Tec de allá, un tal Abdul Jalil Juan Marcos, obtuvieron a cambio de la idea, una concesión exclusiva para un bussiness genial: diligentes como son (y de ideología triunfadora), con la ayuda de un amigo bien colocado en la Secretaría de Finanzas, bajaron recursos del Programa Federal “Talento Emprendedor Empresarial” para financiar el jugoso y original proyecto.
La concesión es nada menos que para... vender cubas, jaiboles, vampiros y cocteles en las bocacalles aledañas a la ruta papal (no directamente por donde pasará el Santo Padre, sino en las esquinas, a la vueltecita), respetando así claramente la ordenanza gubernamental.
--Ay Diosito, cuánta lana se van a levantar estos pillos en tu santo nombre!...se oyó exclamar entre sollozos a una de las damas del Verbo Rosado que acuden con frecuencia al departamento de mujeres a llevar cubetas de neutle para sus reuniones vespertinas en el dispensario de aquí a la vuelta.

2 comentarios:

Xavier González Fisher dijo...

Oiga Eminencia: ¿Y los "copa-rmexicos" y "concanaxicos" esos no irán a vender "indulgencias" con sus brebajes, seguramente adulterados allí "a la vueltecita"? Porque para eso se la pintan solos...

Armando Moncada dijo...

Seguramente, Maese; aquello será un tianguis de listillos, un merequetengue de surrealismo azteca que habrá que ver para creer. Por lo pronto, lo de la venta de "lugares buenos" y la falsificación de boletos para el show es para tirarse de risa.